El inicio 🙈


Una de mis metas este año es: ¡ésta! ¡un blog! Debo confesar que me gusta mucho escribir, y que constantemente estoy teniendo ideas y pensamientos sobre muchas cosas, a veces las anoto y las hago, la mayoría del tiempo quedan en la mente nada más... ¡Es momento de cambiar eso! Así que, los invito a esta nueva experiencia, que salgamos fortalecidos y con esperanza cada vez que escribamos y leamos lo que aquí habrá, porque la idea es esa, que esto no sea un blog de contar lo que me pasa cada día, para eso están los diarios de vida, sino algo que nos haga pensar, meditar y cambiar.

¿Mala suerte?

Estos meses que han pasado en serio han estado llenos de desafíos. Ha decir verdad me encantan los desafíos porque me ayudan a reconocer facetas de mi que sólo aparecen en momentos distintos al día a día y así poder ver que tengo que cambiar o que cosas estoy haciendo bien.

 Hubo un tiempo en que, como diría mi mamá, estaba meada de perro y de gato, todos los días pasaba algo, en serio. Les contaré una de mis tantas experiencias. 

 Cuando estaba a punto de terminar mis prácticas me enfermé de influenza ya que en el hospital en el que estaba había un brote y me contagié. Me dieron licencia, así que falté a mis tres prácticas, pero había una de ellas que si faltabas un día te echabas el ramo. Lo bueno es que como fuimos varios los que tenían influenza se compadecieron de nosotros y nos hicieron firmar un compromiso de que no faltaríamos más a práctica y de que nos sacaríamos sobre 4.0 en el examen final si o si. Con esta condicionante en mente, era viernes, día de práctica final en el CESFAM de Peñalolén. Tenía que llevar unas cartulinas porque íbamos a educar a un adulto mayor sobre la diabetes, dónde tiene que pincharse, tipos de comida, etc, así que la cartulina de verdad que era muy importante. Salí una hora antes en un viaje que usualmente me demoro 40 min, tome la micro y al siguiente paradero me acordé que no llevaba las cartulinas y dije; ¡LAS CARTULINAS! me bajé de la micro y fui corriendo a mi casa, literal corriendo y para darme ánimo decía: bueno, me sirve de ejercicio matutino. Saqué las cartulinas y saliendo se me cayeron al barro porque había llovido ayer y dije: ¡¿EN SERIO?! ¿JUSTO AHORA?. Las limpié y un caballero que siempre está en las mañanas que vio la situación dijo: chuta que tiene mala suerte. Salí corriendo a tomar la micro de nuevo y no pasaba ninguna y las que pasaban no paraban porque iban llenas. Desde que salí de mi casa la primera vez hice una oración para que las cosas salieran como las había planeado hoy: que pudiese llegar a tiempo y que nos fuera bien con la visita al paciente, pero todo estaba yendo mal así que la oración comenzó a transformarse en un: Por favor ayúdame a llegar a tiempo, que la micro se vaya rápido, que pase luego. y eso no sucedió. Llegue al metro y corría por el intermodal para pillar el color correcto y mientras oraba pidiendo que justo estuviera el color de la estación, que no hubiese mucha gente y adivinen que? justo estaba el metro que necesitaba, pero no alcancé a subir y se cerró la puerta en mi cara. Me sentía tan frustrada porque en serio estaba dando todo de mí, corriendo, tratando de tener ánimo, etc. aún quedaba la esperanza de llegar justo a tiempo. Cuando iba en la primera parte del metro oraba pidiendo que en la segunda parte cuando hiciera combinación alcanzara a tomar el color de la estación para poder llegar a tiempo a la micro que me lleva al CESFAM y adivinen qué? corrí y corrí para hacer combinación y de nuevo se me cerro el metro que necesitaba justo en mi cara. Ya era obvio que iba a llegar tarde, pero por 5 o 10 min así que cambié la oración para que por favor la profe llegara tarde y nadie se diera cuenta de que llegaría tarde, porque la profesora tiene el poder de devolverte a tu casa y ponerte ausente por llegar tarde, ya estaba condicional de echarme el ramo si faltaba una vez más, y si me echaba el ramo me atrasaba un año y no podría ir al otro semestre a comunitaria que es lo que más me gusta, además de pagar 4 millones extra, así que en resumen estaba con la media pera. Oraba pidiendo un milagro con toda la fe posible. llegue al paradero de la micro, la tomé y no ubicaba bien donde bajarme así que le pregunté a una señora y me dijo: aquí está el CESFAM, le dije: ¿segura? me dijo que si, así que me bajé y adivinen qué? ¡ME HABÍA BAJADO 4 PARADEROS ANTES! atiné a correr y a orar pidiendo un milagro, pedía que la profe hubiera llegado tarde porque es conocida por ser estricta y exigente, mientras corría me fijaba si venia algún taxi y todos venían llenos, hasta que pude tomar uno. Llegue media hora tarde y dije: ya, si está la profe, le cuento todo lo que me pasó, apelo a su misericordia y si me devuelve a mi casa me pongo a llorar para que me deje en la práctica y así no echarme el ramo. 

 Estaba la profe, le conté todo entre jadeo y tratando de respirar por haber corrido tanto y me dijo: ya siéntese y póngase a trabajar. Me sentí la persona más afortunada del planeta y solo atinaba a dar gracias al Señor en mi mente y a darle las gracias a ella por haberse compadecido de mi. 

 Tenemos "la tendencia del “hombre natural” de exigir con impaciencia e insistir incesantemente recibir las bendiciones que deseamos y que creemos merecer". Aunque lo que pedí fue cumplido, no fue de la forma en que quería y esperaba, pero que si era necesario para mi. Debemos ser humildes para aceptar lo que necesitamos por sobre lo que queremos. “Debemos tener una fe firme en el Salvador para aceptar sumisamente Su voluntad y Su tiempo en nuestra vida, incluso si el resultado no es lo que deseamos o esperamos”.
“Dios espera y confía en que enfrentemos la adversidad temporal con Su ayuda, aprendiendo lo que debemos aprender y siendo lo que debemos llegar a ser en la eternidad”. Muchas de esas cosas que deseamos realmente las necesitamos. Él sabe que tenemos necesidad de todas las cosas, pero debemos pedírselas. 

 Es necesario que “obtengamos la fe de que el Señor está al mando, sea cual sea el resultado, y que Él nos guiará desde donde estamos a donde tenemos que estar. Al orar, nuestras súplicas deben pasar de ‘Te suplico que’ a ‘Te suplico que me des la fe para aceptar cualquier resultado que Tú hayas preparado para mí’”. Él siempre hará lo que es mejor para nosotros, porque nos ama y tiene una visión mucho más amplia de lo que nosotros podemos ver en el momento, aunque eso signifique ponernos al límite física y emocionalmente.
“La rectitud y la fe son fundamentales para mover montañas, si el mover montañas cumple con los propósitos de Dios y está de acuerdo con Su voluntad. Además de comprender que no se trata de que Él hará lo que pedimos, sino que Él puede hacerlo. Tenemos que creer que Él puede hacerlo; y luego, si lo hace o no, depende de Él.” 

 “No sé por qué algunas personas aprenden las lecciones de la eternidad a través de las pruebas y el sufrimiento, mientras que otras las aprenden por medio del rescate y de la sanación”. Pero si sé que todo lo que pasamos por esta vida, si lo sobrellevamos bien, será para nuestro provecho y nos servirán de experiencia.

La esencia del amor

El concepto amor esta tan trastocado que creí sería bueno compartir que es el amor para mí, pero no crean que me voy a poner cursi y decir cosas clichés.

Una de las cosas que más pena me da es cuando dicen que el amor es malo, que trae problemas, que no vale la pena, que es una pérdida de tiempo, que duele y muchas cosas de ese estilo.  La verdad, no puedo imaginar la experiencia que hayan vivido para pensar que el amor es eso, pero claramente esas definiciones no van al caso.

La mayor bendición que podemos recibir en esta vida es dar y recibir amor. He sido tan amada que he creído que nunca podría alguien amarme más y he amado tanto que he creído que no podría amar a nadie más de esa forma. 

Ser amados nos da fuerza y amar a los demás nos da valentía. El verdadero amor es poder, es gozo, es diligencia y perseverancia, es paciencia, es perdón, es progreso, es servicio, es libertad, es perfecto. Somos nosotros los que ensuciamos el amor con nuestra imperfección, con nuestras malas decisiones.
                 
                            
                                 "El amor nunca se rinde"

Siempre he pensado que nosotros simplemente debemos amar a los demás, dejar que el amor fluya, que corra, no hay que dejarlo dentro, aunque no sea correspondido ni siquiera en intensidad, cada vez que amamos los que ganamos somos nosotros. Porque amar es algo divino, nos purifica, nos eleva, nos fortalece, nos vuelve humildes. Pero ¡hay que ser mansos, pero no mensos!

Podría contarles las incontables veces que me han roto el corazón y no hablo solamente de una manera romántica sino también de amistad, de vínculos, etc. La mayoría me diría, pero Javiera! entregas mucho, sientes mucho! y si es cierto, pero no me arrepiento, cada vez que he dado y que he sentido amor aunque no sea retribuido, aunque no sea valorado, aunque no sea apreciado la que siempre ha ganado más he sido yo. Porque he sentido lo maravilloso de amar y de entregar amor, es un sentimiento que purifica nuestro espíritu, que ennoblece nuestra alma, nos hace un poco más celestiales y esa es una de las mayores bendiciones que podría tener, sentir que toco el cielo.

Es necesario que demostremos amor a los demás, en actos primeramente y luego en palabras, el amor al igual que la fe es de acción. No podemos decir que amamos sino lo demostramos.  El amor nos mueve, sino nos estamos 'moviendo' no es amor. 
                     

Muchas veces he deseado sentir el amor de cristo y de mi padre celestial de manera tangible, sentir sus abrazos de felicitaciones o de consuelo, una historia graciosa para alegrar las penas, que limpie mis lágrimas cuando me siento frustrada, que me entregue su sabiduría perfecta cuando necesito guía. Ellos no pueden bajar y darnos ese amor tangible, pero nos ha puesto a nosotros para comunicar su amor a los demás. Somos los responsables de entregar ese amor divino.

Hay personas que creen que las muestras de amor deben ser complejas, extraordinarias y sufridas, cuando en realidad las muestras de amor deben medirse por la intención del corazón. Cuando tu mamá te regalonea, cuando tu papá te da un consejo, cuando tus hermanos te ayudan en tus tareas diarias, cuando tus amigos muestran preocupación sincera por ti, cuando tus maestros se preocupan por tu progreso, cuando tus abuelos te preparan cositas ricas y te dan regalitos.

Seamos personas fáciles de amar y amemos a los demás, porque todos merecemos un poco de amor celestial.








No hay que dejar de sentir

Me he dado cuenta con el tiempo que la gente cada vez reprime más sus sentimientos

Como si el problema estuviese en sentir y no en que hacemos con lo que sentimos. Como si sentir rabia, pena, frustración, decepción, etc fuese algo malo y que el solo hecho de sentirlo te hiciese una mala persona.

Una de mis escrituras favoritas es "por sus frutos los conoceréis", llevando esto a la vida, las malas personas se definen principalmente por las cosas que hacen, por la impulsividad, por el poco autocontrol de sus sentimientos y por lo que generan sus acciones y que todo esto sea de manera constante, porque no podemos definir a una persona por 1 o 2 errores. El arrepentimiento y el enmendar siempre estan disponibles para aquellos que desean cambiar su corazón.

Cada vez que sentimos y somos capaces de reconocer que tipo de sentimiento es podremos generar una respuesta eficaz ante la situación que lo genera y no alimentarlo más si es que solo va a empeorar la situacion o hacernos sentir peor, sino vivirlo en la intensidad adecuada y no repetirlo de manera masoquista. Así cuando ocurran situaciones que provoquen que el sentimiento aparezca de nuevo sabremos como actuar hasta que lo manejemos en su totalidad.

La gente cree que ocultar los sentimientos significa ser fuerte. Cuando realmente ser fuerte es manejarlos, canalizarlos y transformarlos en cosas buenas. Ocultar lo que sentimos solo nos lleva a una acumulación que tarde o temprano va a explotar. Es por eso tan necesario que tengamos a una persona por lo menos en quien confiar y poder decirles con toda libertad que nos sucede, como nos sentimos y porque nos sentimos asi.

                 

Personalmente, la capacidad de sentir emociones es uno de los regalos más grandes que puedo tener. Me encanta vivir cada emoción en su justa medida para luego dejarla ir. Esto me ha hecho ser auténtica, honesta conmigo misma y me ha ayudado a reconocer las cosas que debo fortalecer o cambiar en mi vida.

                         
Cabe recalcar que los únicos sentimientos que debemos alimentar son aquellos que entregan paz y felicidad a nuestra alma. Tales como el amor, la esperanza, la ilusión, la compasión, la empatía, el gozo y muchos otros más.

Espero de todo corazón que puedan tener siempre a alguien tangible a quien abrazar, mirar a los ojos y sentir que de verdad los escuchan, que sienten interés sincero por ustedes, por sus sentimientos y que no los juzgarán. Y espero tambien que seamos así con los demás.





Lo que de verdad importa

Estoy asistiendo a un curso en mi carrera donde te ayudan a reforzar tus técnicas de estudio y tu forma de ocupar el tiempo. Le conté a la directora de carrera todas las cosas que hago y que mi verdadera preocupación más que el estar cansada física y mentalmente era el estar haciendo las cosas que de verdad importan.

Estamos en un mundo que nos promociona infinitas cosas que podemos realizar tales como; viajar por el mundo, hacer múltiples deportes, salir con nuestros amigos todos los fin de semana a lugares entretenidos, asistir a todas las actividades de la iglesia y también a las que no son de esta, tomar miles de cursos para aprender cosas nuevas, leer cientos de libros y ver miles de películas y así muchas cosas más. Si bien todo esto nos hace bien, nos hace felices y nos da un montón de experiencias maravillosas no quiere decir que realmente sea necesario, trascendental o irremplazable.

Muchas veces incluimos actividades en nuestra vida que nos aportan un bienestar momentáneo, que no generan trascendencia en nuestras vidas y que están dentro de las cosas buenas, pero no las excelentes. y a veces es difícil notar la diferencia entre las cosas buenas y las cosas excelentes, olvidamos que el objetivo principal es satisfacer las necesidades esenciales y complicamos nuestra existencia con múltiples actividades en vez de simplificarla.


Hay cosas que debemos realizar si o si porque son necesarias, tales como trabajar, estudiar, hacer deporte, dormir las horas suficientes, tener momentos de calidad a diario con nuestras familias, disfrutar con amigos y fortalecer lazos, cumplir con nuestras asignaciones en los diversos grupos o credos en los que participemos, fortalecer nuestra relación con Dios, servir a las personas que necesiten, visitar a nuestros familiares, si están conociendo a alguien dedicar un tiempo para conocerle de verdad y si están con alguien dedicarle tiempo para amarle de verdad y no por redes sociales, sino en vida real, etc. 



Siendo honesta, si para hacer todo lo que 'debemos' hacer nos falta tiempo, se imaginan cuanto tiempo aún más nos falta para hacer lo que 'queremos' hacer? y aquí es donde me quiero detener. Hace un par de años en un devocional de instituto una autoridad dijo algo que cambio mucho mi forma de ver la vida y sus matices: "Se nos dice que tenemos que alcanzar el equilibrio en nuestra vida diaria, pero eso es imposible. Somos como aviones que a lo largo del viaje inclinan sus alas hacia un lado, luego al otro y a veces están a la misma altura según la necesidad del viaje y las pruebas que presente. a veces nos inclinaremos hacia los estudios, hacia la familia y a veces hacia el trabajo" 

"Puedes hacer cualquier cosa pero no todo"


De la mayoría de nosotros se espera que hagamos más de lo que nos es posible hacer, es por eso tan importante que tengamos una claridad en las cosas que de verdad importan, que de verdad nos ayudan, que de verdad nos hacen felices, pero más importante aún es necesario que consultemos al Señor y que sepamos que es lo que él desea para nosotros, que necesita de nosotros y alinear nuestra voluntad con la suya e idear múltiples planes para llevarlo a cabo y ser hombres y mujeres de acción.

"Tus decisiones reflejan tus prioridades"


Que quede claro que el mejor tiempo invertido y que traerá mayor recompensa a nuestra vida es el que pasamos con nuestras familias y a quienes consideremos miembros de ella. 

Que la velocidad y la rutina no nos consuman, que las infinitas cosas increíbles que nos muestra el mundo que podemos hacer no nos aparte de las cosas que de verdad importan y que tienen trascendencia eterna. Que seamos capaces de escoger las cosas excelentes que nos entrega el señor y la vida, pero por sobre todo que seamos felices haciendo las cosas que hacemos y que cada sacrificio tenga su recompensa. 







Donde calienta el sol

Una de las cosas que más me atraen, me divierten y me interesan es conocer a personas con opinión propia. Y que a su vez son consecuentes o dan lo mejor de sí para vivir de acuerdo a sus opiniones, creencias, etc.

Este mundo está lleno de gente que se suma a las opiniones de los demás sólo por que sí, porque es mayoría, porque es conveniente, porque es fácil sin antes analizar y realizar un juicio hacia esa opinión, pasando a llevar sus gustos, sus creencias, sus deseos, sus valores, etc originando una alteración de su identidad. Está lleno de gente que va hacia donde calienta el sol y que de manera peligrosa atrae consigo más gente cuando muchas veces la opinión en cuestion no es la correcta o incluso ataca, hiere y destruye.

                          

También hay personas que buscan adherir más gente a sus ideas con un fin propio, de manera egoista y no con el ideal de aspirar a algo mejor para la mayoria, algo que eleve, que mejore, que sane.

Realmente es grato conocer personas que pueden compartir su punto de vista de forma honesta, respetuosa, tolerante y humilde y que no tratan de obligarte a pensar como ellos sino que te muestran las cosas desde su mirada y se esfuerzan por comprender como es desde tu lado.

Es importante ser capaz de reconocer que nuestra opinión muchas veces no es la correcta o le faltan puntos para ser la más acertada, decir tienes razón, me equivoque, no lo había visto desde esa perspectiva, ¡qué buena opinión! No te hace más débil, fracasado, tonto o ignorante, sino que te hace humano, capaz de evolucionar, fuerte y humilde.

Espero seamos capaces de reconocer cuando somos movidos por la masa, porque eso puede suceder, y no por eso somos los peores del mundo, sino humanos. En cambio el que se da cuenta y no hace nada o le gusta solo hace un retroceso en su progreso personal y en el de las vidas que ilumina.


Que nuestras opiniones y creencias estén basadas en valores y estandares altos, buscando un bien común, el cambio, la mejora, el progreso, lo bueno de las cosas. Que estén basadas en normas elevadas, en justicia y compasión, en amor y fraternidad.


Basta al día su propio mal

Hay un hormona en nuestro cuerpo que se llama cortisol y tiene diversas funciones una de ella es ser la hormona del estrés, cada mañana ayuda a que nuestro cuerpo pueda enfrentar el desafío enorme de levantarse luego de estar varias horas en pleno descanso, pero para que funcione debe tener a lo menos 45 minutos de sol, es como su carga de energía para así poder funcionar y hacer que nuestro cuerpo pueda enfrentar los desafíos de cada día.

Es lo mismo con nuestra vida, somos seres humanos que necesitan rayos de luz cada día para poder tener la fuerza y el valor para vivir los desafíos que tenemos, pero a veces no podemos ver los pequeños rayos de luz, a veces realmente estamos en completa obscuridad y no solo por un día a veces por semanas e incluso meses. Sentimos que es una tras otra, problema tras problema, que mientras salimos de uno vienen tres más y nos cegamos, perdemos la capacidad de ver y peor aún de sentir esos rayos de luz de nos nutren para tener esperanza y fe en que verdaderamente todo saldrá bien

Una de mis escrituras favoritas es "Basta al día su propio mal". Cuando siento que las cosas se ponen difíciles, que el cansancio me gana, cuando aparecen malos sentimientos, cuando alguien nos hiere o cuando nosotros hacemos las cosas mal, me repito esa escritura y verdaderamente trae paz a mi corazón. Vivir cada día a la vez, entregando lo mejor de nosotros siempre traerá consuelo a nuestra alma.

         "Duerme en paz esta noche. Dios es más grande que cualquier cosa que enfrentes mañana"


Cuando me empiezo a cegar con la obscuridad y no soy capaz de sentir los pequeños rayos de luz me digo la célebre frase del presidente Monson: "Tu futuro es tan brillante como tu fe". y comienzo a pensar en todo lo maravilloso que vendrá a lo largo de mi vida y que lo que esté pasando ahora tendrá fin, es esperanzador pensar en las cosas buenas que vienen y te llena de energía para seguir intentándolo cada día.

"Sigan tratando, sigan confiando, sigan creyendo, sigan progresando. El cielo los está animando hoy, mañana y siempre"


A veces de verdad no ocupamos los sentidos y los dones que tenemos para salir adelante de cualquier situación. nuestra familia,nuestros amigos, nuestros compañeros de trabajo o de universidad, nuestros amigos de la iglesia, los vecinos, algún extraño en la calle que es amable con uno, alguna sonrisa, la oportunidad de prestar servicio a los demás, esos son pequeños rayos de luz en nuestra vida.

Recarguémonos de rayitos de sol necesarios para enfrentar el día, tengamos fe y esperanza en que cosas mejores vendrán. Como le digo a algunos pacientes que sienten mucho dolor, "no hay dolor que dure para siempre" sólo tenemos que confiar plenamente en las promesas de nuestro Padre Celestial y Jesucristo, cumplir con lo que nos pide y hacerlo de corazón y les prometo que todo absolutamente todo estará bien. 



Lo esencial es invisible a los ojos

Sé que es una frase cliché sacada de un muy buen libro, pero realmente representa todo un mundo que profesamos, pero que muchas veces no hacemos parte de nuestra vida.

Hace unos 5 años atrás iba caminando por providencia camino al metro, quería llegar a casa pronto, tenía seminario y quería descansar un poco antes. cuando ya estaba a punto de llegar en un paradero del camino habia un hombre con un bastón y lentes, mientras caminaba lo miré y vi que habia un buen numero de personas, pero que ninguno de ellos estaba junto a él, entonces pensé: ¿cómo va a tomar la micro correcta si no ve? y luego pensé: bah, hay harta gente. Demás que alguno de ellos le ayuda. y seguí caminando, pero tuve la impresión de que tenía que volver, no quería hacer caso la verdad, estaba convencida de que alguien más le ayudaría, hasta que volví y estaba ahí, aún. le pregunté que micro tomaría y comenzamos a hablar de las cosas que hacíamos y también de que nadie le habia ayudado. Cuando llego su micro se despidió de mi y me dijo: es usted muy hermosa y subió. Tontamente pensé: ¿Cómo lo sabe? si el no puede ver como soy.


Me quede pensando todo el camino en lo que dijo hasta que en mi mente apareció esta escritura: "y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que el hombre mira, pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón" quedé impactada, el realmente no podía verme, pero a través de mis actos el pudo notar lo que había en mi interior.

Es un discurso bastante popular el hecho de que el mundo en el que vivimos es superficial y narcisista, pero ¿realmente actuamos en base a ese conocimiento? ¿Escogemos a las personas de nuestra vida por sus dones y como nos hacen sentir o por la belleza que tienen? ¿Nos preocupa más como nos vemos o el cultivar mas dones y talentos, adquirir conocimiento y compartirlo?

Podriamos este año realmente cultivar la capacidad de ver más allá de lo que nuestros ojos naturales ven.

Estaré agradecida infinitamente con ese hombre, porque ese día me dió una gran lección de lo importante que es definir la hermosura de una persona según su alma y sus actos.





Y tú, ¿Quién eres?



A lo largo de mi corta vida me he hecho esta pregunta muuuuuuuuchas veces... ¿QUIÉN SOY? al principio respondía con mi nombre: soy Javiera; con el tiempo comprendí que era más que eso.

No fue hasta que entré a la universidad que realmente comprendí mi verdadera identidad. Lo cierto es que nos componemos de una variada gama de cosas que nos hacen ser quienes somos. Si desglosamos esto podemos sentir que descubrimos un misterio que al comprender y al vivir íntegramente con lo que hemos entendido nuestra vida cambiará.

Nos definimos primeramente como personas, como seres humanos, también por genero al ser hombre o mujer, por inclinaciones, al ser hetero, bi, lo que sea, por nombres, por apodos, por apellidos, a la vez también por que somos hijos, nietos, hermanos de alguien. también por la edad que tenemos, adulto joven, tercera edad, adolescente, por los trabajos que tenemos, por los roles que desempeñamos, por los cargos que tenemos, por los grupos a los cuales pertenecemos, por nuestras creencias, por nuestros gustos y por lastimosamente a veces nos definimos por nuestros errores.

y aquí me quiero detener... no les ha pasado que preguntan por alguien y a veces le responden: el/ella fue quien se puso a pelear en tal campeonato. el/ella fue quien dijo algo de tal persona. el/ella fue quien bla bla bla... o incluso nosotros mismos nos definimos antes los demas y ante Dios por nuestros errores... soy la que se quedó dormida para ir a la capilla, la que no fue a clases, a la que echaron del trabajo, bla bla bla.


Una gran meta para este año sería definir a las personas por las cosas buenas que vemos en ellas, como por ejemplo: ella es la niña que presta servicio constantemente, él es el joven súper amable de tal lado, etc. No caigamos en este juego, no nos quedemos con los errores de las personas, no las definamos por los errores que cometan y ¡Por favor! no se definan a ustedes mismos por sus errores.

Luego de todo esto queda revelar nuestra verdadera identidad, y es que somos HIJOS E HIJAS DE DIOS. ¿Cómo dudar de esta verdad eterna? si, él nos creo. si, estamos hecho a su imagen y semejanza. si, tenemos un toque de divinidad en nuestro interior. si, somos capaces de todo lo que deseamos si es justo y es la voluntad de Dios porque ciertamente somos sus hijos.

Una vez que comprendemos realmente quienes somos no existen imposibles, nos sentimos seguros de nosotros mismos y nos esforzamos por mantener nuestra identidad, porque ser hijo de Dios no es cualquier cosa. Lo importante es que una vez que sepamos con convicción que somos sus hijos , decidamos vivir de manera íntegra a este conocimiento y les aseguro verdaderamente que sus vidas cambiarán.

Me siento realmente bendecida por saber quien soy, por haber resuelto esta gran pregunta que estoy segura que todos se han hecho alguna vez y deseo de todo corazón que ustedes puedan descubrir por si mismos quienes son. dense una oportunidad de descubrir lo maravillosos que son y lo aún más maravilloso que pueden llegar a ser. todos tenemos algo divino en nuestro interior: DÉJENLO FLORECER 









UN NUEVO COMIENZO

Cada vez que me he sentido abrumada por algo que he hecho, que he dejado de hacer o simplemente cuando vienen problemas, mi mamá de manera dulce, pero firme me dice: Todo tiene solución en esta vida, menos la muerte. Al comienzo no lo entendía, pensaba: ¡cómo esto va a tener solución! ¡Si tuviera no estaría así de abrumada! hasta que un día lo entendí, estaba pensando de manera errónea porque no era capaz de ver más allá del problema y además veía con ojos terrenales, solo me detenía a pensar en el problema y en las consecuencias, en el precio que tenía que pagar. 

La  verdad es que alguien ya pagó el precio por nosotros de todo lo que hiciésemos y padeciésemos en esta vida. 

Me he dado cuenta de que la mayoría de las personas al hablar de la expiación se refieren más que nada a los errores que cometemos, si, la expiación abarca nuestros errores, pero abarca infinitamente mucho más, como nuestras tristezas, nuestros dolores, nuestras enfermedades, nuestras frustraciones y muchos otros sentimientos. ÉL VERDADERAMENTE LO SINTIÓ TODO. 

Me siento tan agradecida de que gracias a nuestro Salvador verdaderamente siempre habrán nuevos comienzos y de que en cada comienzo estará Él y su infinito y perfecto amor.  Para el Salvador sean cuales sean nuestras circunstancias SIEMPRE valdremos la pena.

No les digo esto porque es bonito contarles que hay alguien que siempre nos amará y que realmente podemos ser perdonados y sanados. No me gusta decir cosas que no sé o que no he experimentado. Pongan a prueba realmente al Señor, no con ganas de desafiarlo y comprobar si es que de verdad existe o no, sino con verdadera intención y necesidad y les aseguro que les responderá, en el tiempo y la manera que vaya de acuerdo a su voluntad y al proyecto que tiene diseñado para nosotros. 

NUNCA es demasiado tarde para hacer lo correcto, para pedir ayuda, para pedir perdón, para dar las gracias y para entregar amor.